El calvario de los vecinos de la calle Rodó no tiene fin

Los vecinos de la calle Rodó, entre Dr. González y Brum, están cansados de reclamar y no tener respuestas por los ruidos molestos del boliche instalado en esa cuadra, que abre todas las noches y madrugadas, de lunes a sábado. Además de la impotencia, la situación también genera agotamiento físico debido a que en algunos casos les resulta imposible dormir de forma normal.
“Abre de lunes a sábado y a eso de las 01:30 levantan un volumen increíble que va aumentando en el correr de la noche. A eso de las 4:00 que es cuando mi pareja se levanta para ir a trabajar, está muy zarpado”, dijo a InFlorida una vecina de la zona que prefirió mantenerse en el anonimato.
Agregó que desde hace un tiempo llama a la Policía porque además de la molestia por el ruido, algunos de quienes concurren al boliche se instalan en la puerta de su casa. “A discutir o a lo que te imagines”, comentó. “Y es un embole eso también, gritan, se pelean mal, se pegan, yo tengo una hija adolescente en casa y la situación no da”, expresó.
NO PASA NADA
Los ruidos y los movimientos nocturnos en esa cuadra no son nuevos. Los vecinos del lugar ya juntaron firmas y denunciaron su caso en los medios. “Y ni bola, no pasa nada, nunca”, señalaron.
“Las motos hacen ruido, hacen picadas, bobean con el acelerador, tres o cuatro motos con gente levantando niñas en bolas, una vergüenza”, señaló la vecina, quien agregó que es normal que los birrodados pasen contraflecha por Rodó.
También recordó que cuando funcionaba otro boliche a metros del mencionado lugar, El Cabito, era frecuente que se hicieran fiscalizaciones de INAU, Higiene y Policía, pero parece que en el que sigue funcionando eso no ocurre, según indicó. “Me encanta que hagan lo que tengan ganas, pero que no me molesten, y que las autoridades midieran a todos con la misma regla”, concluyó.
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