El sondeo "Costo Mundial de Vida" de la unidad de
inteligencia de The Economist ubicó a Montevideo en el lugar 62
dentro de un ranking mundial. Además lo posicionó en el lugar más alto de la
región.
Almatý, en Kazajistán, resultó ser la menos cara, seguida
por Lagos, en Nigeria, mientras que Caracas fue la más barata en América Latina
pese a la hiperinflación. San Pablo subió 29 puestos al lugar 78, que comparte
con San José de Costa Rica, mientras que Río de Janeiro avanzó al puesto 86,
que comparte con Lima, Santiago de Chile y Bahréin.
"Ambas ciudades han soportado un viaje en una montaña
rusa en términos de costos de la vida en años recientes", sostiene el
estudio. Hace cinco años, San Pablo estuvo entre las 30 ciudades más caras del
mundo, pero el año pasado fue una de las 30 más baratas. En sentido contrario,
la devaluación del peso argentino hizo que Buenos Aires perdiera 20 lugares
para quedar en el puesto 82, junto con Ciudad de México, que bajó nueve
escalones.
Nueva York ocupó el noveno lugar, con una caída de dos
lugares por un dólar levemente más débil, pero está todavía mucho más arriba
del puesto 46 que tenía hace cinco años.
Los cálculos del estudio se basan en el precio de al menos
160 productos y servicios que incluyen alimentos, bebidas, vestuario, artículos
para el hogar y para el cuidado personal, que se convierten a dólares.
Según la publicación, la tendencia es que las ciudades
asiáticas estén entre las más caras. Singapur ocupa el primer lugar, seguida de
Hong Kong, mientras que Tokio está en el cuarto lugar, Osaka en el quinto y
Seúl en el sexto.
REUTERS