Importantes destrozos se registraron en la fauna nativa en la zona del camping del Parque Robaina. Aunque el hecho ocurrió la semana pasada, todavía pueden verse en el lugar las ramas y los troncos cortados esparcidos a lo largo de varios metros, e incluso cubriendo buen número de bancos y parrilleros.
MILES
DE KILOS
Según
información a la que accedió EL HERALDO, se cortaron en total unos 2.500
kilos de tala y coronilla. Aunque se logró dar con la persona responsable del
hecho y llevarlo ante la Justicia, la misma quedó en libertad. Incluso antes de
ser detenido, el carrero responsable del hecho arrojó la leña a la calle en un
intento por deshacerse de la misma, se informó.
PROTECCIÓN
En
Uruguay el monte nativo se encuentra protegido porque la Ley Forestal Nº
15.939, que establece la prohibición de su tala, a excepción de los casos en
los que el producto de la explotación es para consumo interno del
establecimiento o cuando se cuenta con un plan de manejo del monte nativo
aprobado por la Dirección General Forestal. Esto ha contribuido al incremento
de la superficie ocupada por vegetación arbórea autóctona en Uruguay. En
consecuencia se pasó de 667.000 ha en 1990 a 850.000 ha en 2014.
MULTAS
Las
multas a quienes talan monte nativo se elevaron en los últimos años de los US$
400 por toda la operativa de la tala no autorizada (así se tratase una hectárea
o 100 has) a US$ 12.500 por hectárea en la que se hizo la tala no permitida.
Además del pago de la multa, comentó, se exige al infractor que haga una
publicación en dos diarios de tiraje nacional dando cuenta de la infracción y
de la multa, a los efectos de generar un ejemplo. También se exige al infractor
la reposición de los árboles con un plan de reforestación que esté aprobado por
la DGF. Las multas aplicadas desde el año 2010 hasta el 2015 por la tala ilegal
en bosques nativos de Uruguay, se aproximaban este último año a US$ 1,2
millones.
EL
HERALDO
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