Por tal motivo, un equipo del organismo, encabezado por Alejandro
Nario, realizó una inspección en el lugar, y constató la falta de 30 metros de
alambrado y los daños ocasionados, e inició la gestión administrativa
correspondiente. OSE, por su parte, realizó una denuncia judicial por daños a
la propiedad.
Nario, enfatizó: “El alambrado se reparará, pero queremos que los
productores sepan que sus acciones, que tienen un costo para toda la
ciudadanía, atentan contra el ambiente y el agua de más de la mitad de los
uruguayos. Ya pasó el tiempo en el que cada uno hacía lo que quería”.
El alambrado de 110 kilómetros fue colocado en marzo por OSE, en
cumplimiento a la medida 7 del Plan de Acción para la Protección de la Cuenca
del Santa Lucía.
La medida 7 es específica en este tema y consiste en “restringir el
acceso directo del ganado a abrevar en los cursos de la cuenca hidrográfica que
son fuente de agua potable”. Con ese fin, se instaló el alambrado perimetral en
el entorno de los embalses de Paso Severino, Canelón Grande y San Francisco y
el acceso al agua para el ganado se previó mediante la instalación de tomas de
agua o bebederos.
PRESIDENCIA
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