“El Campeones Olímpicos viste sus mejores galas, que la pelota siga rodando”, había señalado a FloridAdiariO el ex intendente Juan Giachetto en agosto de 2008, al dejar inaugurado un estadio de nivel nacional e internacional, con una cancha envidiable y en un nivel como pocos en el interior y la capital del país.
En aquella oportunidad, rodeado de una fiesta deportiva, el remozado complejo fue reinaugurado a un costo de más de un millón de pesos, y luce desde entonces, por primera vez desde su inauguración el 25 de agosto de 1927, los aros olímpicos, que son soportados por gruesas columnas existentes a espaldas de la Tribuna José Nazzasi, destinadas a un futuro techado que sigue en el debe.
Unas de las características fundamentales, pasan por el estado del campo de juego de 105 por 68 metros , con dos tipos de césped, para verano e invierno y un tratamiento constante de riego con 32 aspersores, un pozo y bomba para obtener el agua, habiéndose colocado nuevos caños y cámaras para un adecuado drenaje.
La cancha cuenta además con un especial sistema de drenaje por cañería que, para la comuna local, significó la tarea más engorrosa que fue encabezada por el ingeniero Salvador Invernizzi.
Pero las obras requirieron además la participación conjunta de las direcciones municipales de Desarrollo Sustentable y Paseos Públicos; Administración; Obras, Vialidad, Arquitectura y Agrimensura; y la Dirección de Deportes.
13 cabinas con vidrios antirreflejo, instalación eléctrica a nuevo, 16 nuevos focos de 1500 w y lámparas nuevas, tablero electrónico, baños para discapacitados y un parquizado total del entorno, son sólo algunos de los trabajos que posibilitan que la denominada “joya del sur”, luzca ahora como pocas.
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