Según pudo saber EL HERALDO, los controles permitieron
establecer que dos los policías sometidos al control habían consumido marihuana
en las 48 horas anteriores y los otros dos cocaína. Inmediatamente, se les
inició un sumario administrativo y, aunque hay que esperar que se cumplan los
procesos de la investigación, en los casos detectados anteriormente por el
Ministerio del Interior, los policías fueron separados definitivamente de sus
cargos. Mientras están sujetos a la investigación, la separación de sus
funciones es de carácter preventivo, a la vez que se les retiene el arma de
reglamento y la mitad de su salario. Estos controles a nivel de personal
policial son de carácter aleatorio, aunque, según indican también los
precedentes, suelen practicarse a efectivos sobre los que existen sospechas de
consumo de drogas.
EL HERALDO