300
dólares, 20.000 pesos y otros efectos contenía una cartera sustraída a la
propietaria de un expendio de comidas al paso ubicado en Avenida Artigas e
Ildemaro Rivas, junto al cruce de la vía férrea, en pleno centro de Sarandí
Grande, en un nuevo ilícito que se suma a la ola de robos registrada en los
últimos 15 días en la segunda ciudad del departamento.
La
damnificada arribó en su automóvil a su carro de comidas ubicado en la acera
oeste de la avenida, carente de edificación ya que está situada junto a
terrenos de la vía férrea, estacionó e ingresó al negocio. Apenas 15 minutos
después solicitó a su hijo que fuera en busca de la cartera que había dejado en
el asiento trasero de su auto, pero ya no estaba allí.
El
hurto fue denunciado ante la Seccional 4ª de Policía de esa localidad, donde en
las dos últimas semanas han ocurrido otros cinco robos que permanecen sin aclarar.
El más importante fue el ocurrido en un tienda en pleno centro de la ciudad de
la que fueran sustraídas cientos de prendas de vestir cuyo valor total asciende
a 6.000 dólares. Frente a la tienda desvalijada y la misma madrugada en que
ocurrió el robo fueron a la vez hurtadas una bicicleta Scott de elevado valor y
otra desde Plaza Gallinal. Días después, una motosierra Husqvarna, una maceta,
un taladro y diversas herramientas fueron sustraídas de un establecimiento
ubicado en ruta Nº 57. Asimismo, a plena luz del día, en la tarde del jueves
fue sustraída otra bicicleta, único medio de transporte de un joven padre de
familia, frente al liceo Faustino Harrison.
Un
individuo poseedor de antecedentes penales por hurto y homicidio es el
principal sospechoso de la sucesión de los robos registrados en Sarandí Grande.
Esta persona, que circula en una moto tipo Cross, es constantemente vigilada
por personal de la Seccional 4ª de Policía.
EL
HERALDO