Veinticinco familias floridenses integrantes de COO.VI.AR (Cooperativa de Viviendas Artigas) vienen trabajando sin pausa en pos del sueño de la casa propia. La obra, en pleno corazón del Prado Español, avanza a buen ritmo. Fabiana López, integrante de la mencionada cooperativa, habló con EL HERALDO sobre los orígenes de la misma y cómo se vienen desarrollando los trabajos.
CINCO AÑOS ESPERANDO
“Somos 25 familias trabajando, en los planos están dispuestos 10 casas en este terreno con el salón comunal y 15 casas en el terreno de abajo. Hay tres casas de tres dormitorios y el resto son de dos. La cooperativa se formó en abril de 2008 y la construcción comenzó el 23 de enero de este año. La primera formación de la cooperativa eran policías, después algunos abandonaron y se llamó a gente de afuera para completar, y ahí comenzó a encaminarse la cosa”, comentó López.
ALGUNOS SE FUERON
“Ha entrado gente, otra se ha ido, unos por no cumplir, otros porque no están de acuerdo con algunas cosas del sistema, pero eso no lo disponemos nosotros, todo viene del Ministerio, y cuando te imponen cosas vos te tenés que manejar con lo que te dan. Hay gente que no está de acuerdo con el sistema, con que de repente va a pagar lo mismo un matrimonio solo que un matrimonio con tres hijos y cosas por el estilo. Todo depende de si precisás una casa de tres o de dos dormitorios, y obviamente si el núcleo familiar no es acorde a que tengas una casa de tres dormitorios, no te lo van a dar porque vos quieras. Hay mucha cosa que de repente la gente no entiende o no está tan necesitado de una casa con este sistema como para adaptarse”, agrega.
POR AUTOCONSTRUCCIÓN
Sobre cómo es el trabajo, añade López. “Se hacen 21 horas semanales de trabajo, se hace un cierre semanal y un cierre mensual, eso es un control nuestro para exigir el cumplimiento. Dependiendo de los cierres se hacen de cuatro semanas o de cinco al mes y después está el tema de que optamos, cuando nos comenzamos a cansar, por pagar algunas horas de 23 a 7 de la mañana, y el resto de las horas las hacemos nosotros. Recibimos asesoramiento de un grupo técnico, contadora, arquitecto, técnico prevencionista. Hay gente que por primera vez agarró un martillo y un clavo y bueno, hay que hacerse.”
“Lo estipulado son 18 meses para hacer la obra, pero en los 18 meses que maneja el Ministerio no cuentan ni días de lluvias y algún paro que pueda surgir. También se te puede atrasar por el tema de falta de permiso de BPS. Ahora, por ejemplo, estamos esperando el permiso del BPS, no podemos empezar a levantar paredes, no podemos pasar del nivel del suelo, hasta no tener ese permiso, y esas son las cosas que en el correr del tiempo te van trancando, te hacen parar la obra. Mientras haya plata le vamos a ir dando. Parte del dinero lo aportamos nosotros y parte te lo da el Ministerio. El Ministerio no te da la plata por ejemplo para pagar las máquinas para hacer los pozos; a pico y pala ya intentamos y es imposible, hay que pagar las máquinas porque tiene que ser todo con boleta. El Ministerio te da para material de barraca y la mano de obra de los contratados, que son el arquitecto, el capataz con el ayudante y después se van a tomar los oficiales de acuerdo a las necesidades de la obra.”
Diario EL HERALDO
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