La historia de la salvación

Jorge Giordano, técnico de Juventud de Las Piedras, y Mauricio Larriera, entrenador de Racing, hablaron con Ovación de las claves para lograr la permanencia en Primera División. Los floridenses manifestaron lo difícil que es jugar por el descenso.

Jorge Giordano y Mauricio Larriera tienen muchas cosas en común. Ambos son de Florida, son exfutbolistas, integraron cuerpos técnicos en los grandes, y hoy los une algo más: lograron "salvar" a sus equipos -Juventud de Las Piedras y Racing, respectivamente- del descenso. Y como si estuviesen marcados por un destino en común, consiguieron el objetivo el mismo día, y con una fecha de antelación al cierre del torneo. Ni suben, ni bajan, se quedaron en Primera.

"Jugar un descenso es angustiante, estresante, es difícil", afirmó Giordano, técnico de Juventud, y es un punto en donde los dos coinciden. "En un país tan futbolero, si a uno le toca la mala suerte de tener que descender, ya te ponen el rótulo y, hay tanta competencia profesional y de buen nivel, que es muy probable que uno ya no entre más en el bolillero, es así como tener una pistola 9 mm. en la sien. Cuando empezamos el año no era así, estábamos en una posición expectante pero después, cuando vimos la competencia, los rivales que teníamos, era 'sangriento', por decirlo de alguna manera, era muy competitivo y muy parejo, ahí ya empezamos a asustarnos un poquito", agregó Larriera, quien tomó la conducción de Racing en el Clausura.
Más distendidos, en la plaza de deportes de Villa Biarritz, ambos técnicos volvieron a remarcar lo duro que es jugar por la parte baja de la tabla y más aún cuando es un domingo de derrota. "Es feo, uno poco a poco va manejando la situación, que a veces involucra a gente que no tiene nada que ver. Muchas veces uno hace pasar mal a la familia, pero es la vida del entrenador y hemos elegido esta profesión", sostuvo Giordano.
Los técnicos supieron ser rivales en el fútbol local de Florida, pese a que Giordano le lleva seis años a Larriera (49 a 43). Y, por eso, no faltaron las bromas: "¡Siempre ganaba Atlético!" bromeó, entre risas, el entrenador de Juventud, quien supo enfrentar al Quilmes de Larriera. También había rivalidad  entre sus escuelas, ya que el DT de Racing fue a la Guglielmetti, la número 4, y técnico del equipo canario asistió a la José Pedro Varela.

PESO

"A pesar de no haber estado nunca en posición de descenso directo y de que mucha gente venía y nos decía que estábamos salvados, incluso varias fechas antes, quizás porque el equipo funcionaba bien y sacaba algunos resultados, sufríamos porque los otros equipos ganaban. Cuando logramos la permanencia fue como sacarme una mochila de varias toneladas de encima porque además, estoy involucrado hasta afectivamente con el club", dijo Larriera, quien dejó a "La Escuelita" en Primera División intentando siempre jugar buen fútbol y yendo al frente, incluso contra rivales que están peleando por el título: "Cuando tomo a Racing ya conocía a los jugadores, después vi algunos videos y conocía bien la identidad del club, tenía que ser fiel a esa identidad, a esa forma de juego, y estaban los jugadores para ello, no era un capricho. No soy fundamentalista, trato de adaptarme a las circunstancias, pero creíamos que era la forma de pelear la permanencia y así nos comprometimos con la dirigencia".

Para Giordano el punto de inflexión para la salvación fue el segundo tiempo contra Defensor Sporting y el triunfo ante Rentistas de visitantes: "Ahí fue cuando pensamos que si manteníamos el rendimiento teníamos posibilidades de mantener la categoría".
"Identificamos tres cosas para el objetivo: la gran entrega y el convencimiento de los jugadores a una propuesta; la credibilidad de los dirigentes, que nos hicieron sentir valorados y respaldados y el apoyo que tuve de mis compañeros de trabajo, sobretodo en los momentos difíciles porque el entrenador siempre está muy solo", concluyó Giordano.

OVACIÓN DIGITAL

Mirá la entrevista en:
http://www.ovaciondigital.com.uy/futbol/historia-salvacion.html