PARA LA FIFA NO ES ALARMANTE
El número que dio a conocer la FIFA pone la piel de gallina. Es que la entidad madre del fútbol mundial informó que en los últimos cinco años murieron 84 futbolistas por motivos de índole cardíaca mientras disputaban un partido o se encontraban entrenando. La encargada de recabar esta información fue la Comisión Médica de la entidad con sede en Suiza. Para obtener estos datos, 129 de las 208 federaciones asociadas prestaron su colaboración.
"Este es el punto de partida, desde ahora cada miembro asociado va a registrar este tipo de incidentes e informarnos para que podamos analizar cuáles son las patologías detrás de las muertes", declaró Jiri Dvorak, jefe médico de FIFA.
Sin embargo, y llamativamente, el médico sostuvo: "84 casos de muerte súbita no es un resultado alarmante en relación a la población que practica fútbol, y si se extrapolasen la media de muertes entre la población por este tipo de problemas cardíacos a los 300 millones de personas que practican fútbol se registrarían unas 1.500 muertes anuales”, analizó.
Dvorak profundizó su análisis, y advirtió: “Tener un desfibrilador en cada campo es cuestión de vida o muerte". Según contó, se hará todo lo posible para que esto sea de carácter obligatorio. Como ejemplo de la importancia de contar en las canchas con desfibriladores, el médico citó el caso del jugador del Bolton Fabrice Muamba, que luego de descompensarse sobre el césped pudo ser reanimado.
En su informe, Dvorak también hizo fuerte hincapié en los controles preventivos. Para ello, aludió a las trágicas muertes del camerunés Marc-Vivien Foe y del jugador español del Sevilla Antonio Puerta. “Con exhaustivos controles podrían haberse evitado”, manifestó. Otra de las claves para conocer los motivos de las muertes es el factor genético, pero sobre eso se avanzará en los próximos años
En Budapest, Hungría, donde la FIFA concluyó su Congreso Médico, Dvorak explicó que el deporte debe utilizarse para dar el ejemplo ante las distintas sociedades.
Agencias Internacionales
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