sábado, 14 de enero de 2012

Las verdaderas causas del alejamiento de Bartel

En nuestra edición del día de ayer –jueves 12- se publicó el comunicado de la Directiva de la Asociación de Usuarios de Salud Pública, en el que se decía que Graciela Bartell, por motivos de salud, solicitó no participar por un tiempo del trabajo en la comisión.
Quedó muy claro que los Directivos de la Asociación procedieron a nombrar a Walter Molina como vocero de la misma, y como suplente Enrique González.
Lo que también quedó claro es que luego de cada reunión, las que realizan los segundos martes de cada mes a las 20 hs. en el Salón de Actos del Hospital, se realizarán las declaraciones pertinentes a la prensa.
IMPORTANTE
Y expresamente se solicita a los USUARIOS que el único lugar para llevar alguna inquietud,
será, de ahora en adelante, en el ámbito de las mencionadas reuniones o de lo contrario en la
Oficina de Atención al Usuario del propio hospital.
Justamente respecto a todo lo antes dicho y aclarando alguna mala interpretación involuntaria
de lo publicado ayer, Walter Molina se comunicó con la redacción de El Buscador diario, haciendo saber expresamente que lo que se intenta evitar es que los usuarios se dirijan en
forma personal a los integrantes de la Comisión de Usuarios, puesto que han habido episodios inapropiados por parte de alguna persona que no supo medir las consecuencias de sus actos.
TAREA HONORARIA
Y viene a cuento aclarar los verdaderos motivos por los que Graciela Bartell, luego de diez años trabajando en forma honoraria por los usuarios del hospital, ha pedido un período de licencia.
Resulta que la señora Bartell desde hace ya un tiempo está padeciendo algunos inconvenientes en su salud, lo que la ha llevado a realizar un tratamiento en la capital del país para poder recuperar plenamente su estado saludable.
Todo esto inevitablemente le quita tiempo de lo que es el desarrollo de su vida cotidiana,
además de que ella nunca negó una respuesta a todos aquellos que se comunican con ella, en forma telefónica o personal y a cualquier hora en su domicilio.
Pero lo que desbordó la paciencia fue un episodio de violencia que tuvo que soportar días
pasados cuando estaba por levantar medicamentos en la farmacia del hospital.
COMO TODOS
Ella hacía la cola como todos y de repente se acercó alguien que le habló en forma grosera y violenta, y después la golpeó con una carpeta, reclamando de su accionar y reprochándole y diciendo que «¿para qué se le pagaba?».
Y en este punto debemos aclarar que cualquier tarea honoraria, significa que las personas
que la realizan no perciben beneficio económico alguno.
Diario EL BUSCADOR

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