Los empleados que llevan adelante el proceso de formación de la Cooperativa El Águila, aseguraron a FloridAdiariO que hay varios clientes que esperan por la formación del grupo para invertir.
“Los clientes no quieren saber nada con Kindale, sí con la cooperativa”, sostuvo Oscar Ferreira. El obrero indicó que el pedido en este momento es de “acelerar los trámites ante la presencia de inversores interesados en trabajar con nosotros”.
Incluso uno de los próximos pasos es que el reestablecimiento de la energía eléctrica sea a nombre del grupo cooperativo. Para ellos, los trabajadores tratan de obtener en las próximas horas el Registro Único de Contribuyente (Ruc) para al menos iniciar ese trámite ante la Ute.
“Queremos al menos eso para negociar el tema de la luz y también acceder a la personería jurídica”, explicó Ferreira.
El otro aspecto a acelerar es el proyecto que se encuentra en la Corporación Nacional para el Desarrollo, para lo cual las consultas son en la órbita política.
“Nos estamos moviendo políticamente porque Kindale ya no funcionará más. Pasará a la quiebra o la pedirán los funcionarios por deudas salariales, pero la realidad es que necesitamos que se apure el proyecto para iniciar la cooperativa”.
Las demoras son repartidas. Por un lado los trabajadores reconocen no haber entregado las firmas al Ministerio de Cultura en tiempo y forma para el registro. Por otro, “la enorme burocracia de este país”, se afirmó.
“El Aguila”, fue el primer nombre que tuvo la curtiembre floridense. Según consta en su página web “es una empresa de tradición netamente familiar, que comenzó sus actividades en la década del 1940′
“Posee una planta industrial preparada para producir diariamente 1.500 cueros vacunos hasta el estado de “Wet Blue” y 1.000 cueros vacunos hasta el estado “terminado”. Cuenta con un parque de maquinaria de última generación adecuado para la producción de cueros vacunos enteros. Caracterizada por una amplia y rica tradición en la producción de cueros blandos y toques suaves con una diversa gama de productos así como también por su ductilidad y flexibilidad”.
NEGOCIOS
Ferreira dijo a FloridAdiariO que incluso hay otras curtiembres en traer trabajo a esta planta, así como inversores, empresarios y faconeros. “Pero todos quieren a la cooperativa formada y allí recién hablar de negocios. Hace cinco meses que venimos hablando pero todos dicen que no quieren nada con los Wallerstein, pero sí con la cooperativa”.
CASI TODOS
El grupo cooperativo fue ingresado al ministerio con 240 trabajadores. Al menos 15 quedarían afuera por motivos de no poder acceder en tiempo y forma, pero se integrarían más adalente.
De todas maneras, parte del personal accedería a su jubilación a mediados de año y el número podría bajar hasta 200. “Manejamos esa planilla por el retiro de compañeros y alguno que no esté de acuerdo. Vamos a hacer todo lo posible que esté a nuestro alcance. Lo hicimos para la empresa. Ahora que es para uno, nos vamos a estar moviendo y molestando a todo el mundo”.
FLORIDADIARIO
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