"Esto parece tierra de nadie", dijo un indignado familiar de María del Carmen Rapallini Rocca, propietaria de un comercio de ramos generales en la localidad de Mendoza Chico, frente al molino Cocomen, comercio éste que fue visitado por los amigos de lo ajeno el pasado viernes en horas de la madrugada.Mientras la propietaria dormía, un grupo bien organizado arrasó con el local comercial, llevándose de todo: balanza electrónica, cortadora de fiambre, fotocopiadora, 6, pantalones de jean, 3 bermudas, cigarrillos, tabaco, hojillas, tarjetas de celulares y dos casilleros de Coca-Cola.
Además, robaron 10.500 pesos que había en la caja registradora y un TV plasma de 32 pulgadas marca JVC.
Los ladrones habrían entrado mediante el forzamiento de una puerta de blindex. Se calcula que el monto de todo lo robado puede rondar los 150.000 pesos o más.
UNA COSTUMBRE
Según vecinos de la zona, en los últimos dos o tres meses se han sucedido una serie de robos que resultan más que llamativos. Fueron robados el comercio de Rapallini, las familias Estefan y Castrillón, el boliche y la sede del Club Treinta y Tres, dicen, "y cuando se pide alguna protección a las autoridades, no saben qué responder", dijo un vecino consultado.
REJAS Y DOBLE CANDADO
Los vecinos de Mendoza Chico viven con estupor esta ola de inseguridad. "La última vez que vino por acá la jefa de Policía Alida Silva (foto) nos aconsejó que pusiéramos rejas y doble candado en las puertas. Con eso nos dijo todo acerca de la confianza que tenemos que tener a los efectivos policiales", indicaron.
Los hurtos se han multiplicado en estos últimos meses y para los vecinos "hay alguien que entrega (el robo) y vienen de otros lados a hacer el trabajo".
Diario EL HERALDO
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